Hoy he leído una carta publicada por una madre que perdió a su hijo. A él no le dio tiempo de hacerlo porque su llama se apagó a los 27 años, pero su madre lo ha hecho por él.
Es una carta con trasfondo de amor pero también de connotaciones tristes porque en sus últimos momentos fue consciente de haber dedicado más tiempo a qué, que a quienes. Esa era la sensación que él tenía, aunque seguramente era un sentimiento irreal porque al parecer era todo amor.
Me ha hecho reflexionar mucho y aquí frente a la ventana, en silencio, pensando, analizando cada uno de mis pensamientos, oliendo la brisa, sintiendo la paz del momento y repitiendo en mi mente todo lo expuesto en esa carta, me he sentido empática con él, a la vez que triste por lo que esa madre estará sintiendo.
Me siento muy cómplice de él, porque cómo él, pienso que no enfocamos nuestro ser, nuestro cuerpo, nuestra mente hacia lo mportante, lo enfocamos en lo que creemos que es importante, porque las prioridades cambian cuando sabes de antemano que no te queda mucho por dar.
Quiero empezar desde ya, a crearme otra hoja de ruta distinta, otro camino hacia lo esencial, lo pequeño, hacia aquello que no se ve, no se palpa pero es aquello por lo que vale la pena invertir tiempo y ganas.
Quiero adelantarme a ese momento final y llegar a él sabiendo que he dedicado mi tiempo con las personas importantes para mí.
Todo lo que no son momentos, risas, palomitas con charlas, chistes con gente amada, todo lo demás es superfluo. Todo lo demás sube y baja, viene y va, pero un abrazo, un «te quiero», un «no pasa nada, un «va a salir bien», un «vayamos a cenar»..esas cosas tan insignificantes pero tan grandiosas a la vez, es lo que hacen la diferencia entre emprender el último camino con felicidad o con sentimiento de culpa.
Me gustaría tanto poder entrar en vuestros corazones para inyectaros mi actuales pensamientos que cómo siempre he querido hacerlo cómo mejor se me da, con palabras escritas.

Realmente triste y conmovedor.
A esta familia porque es conocida y nos ha impactado mucho.
Pero cuántas personas jóvenes, muy jóvenes nos dejan cada día y tal vez con ese mismo sentir y no nos enteramos…
Creo que haces una buena reflexión que hay que sacar el jugo de la vida, como mejor crea cada cual.
Unos con su familia, otros con amigos, pero siempre sumando y con positividad.
El amor será todo lo que nos llevemos y todo lo que dejaremos.
Recibe un abrazo🌹
Me gustaLe gusta a 3 personas
Muchas gracias por tus palabras…así es..un abrazo para tí también..
Me gustaLe gusta a 1 persona
Aylin me parece que siempre compartes cosas que nos dejan reflexionando, lo cual valoro mucho y de eso se trata la vida, estamos aquí para aprender como ser una mejor versión de nosotros mismos. Fluir, vibrar y vivir en salud, paz y amor.
Un abrazo grande.
Me gustaLe gusta a 2 personas
Muchas gracias, un abrazo para tí tambien..
Me gustaLe gusta a 1 persona